NUESTRA PROPUESTA DE VALOR

Hemos llegado al último punto de nuestro proceso de desigh thinking: la validación. Consiste en presentar nuestro prototipo a nuestro cliente para escuchar y aprender de sus opiniones. El early adopter es aquel cliente que tiene ese problema que nosotros intentamos solucionar y que están interesados en probar nuestro prototipo.

Durante la validación es clave una interacción efectiva, siendo lo más habitual una entrevista con el cliente. La meta de la validación es aprender de la opinión del cliente, con el fin de corregir los errores que pueda encontrar y pivotar cuánto sea necesario hasta dar con la propuesta de valor que tenga salida.

¿Cómo podemos conseguir esto? Principalmente formulando preguntas abiertas, que inciten al cliente a desarrollar su opinión.

¿Cuántas entrevistas son necesaria? No hay un número exacto, lo más adecuado es continuar haciendo entrevistas hasta que ya no aprendamos algo nuevo de ellas.

Con todo este proceso, vamos a ser capaces de generar nuestro validation board, sobre el cuál vamos a plasmar nuestras hipótesis sobre el cliente, el problema que tiene y la solución que ofrecemos. Nos permite detectar los aspectos sobre los que debemos pivotar y corregir, podemos encontrar otros problemas que también interesen a nuestro cliente. Al final, podremos obtener una visión más clara de nuestra situación, que podemos representar en nuestro lienzo de propuesta de valor o lienzo problema-solución.